A Dios

A ese en el que no crees, ese que te va a oír si lo encuentras, le estoy pidiendo un favor. Yo que he sido buena como he podido, yo que a pesar de todo soy optimista, yo que creo haber hecho el bien, yo, apelo a las oraciones de mi abuela , a sus incontables rosarios y sus infinitas bendiciones; yo que soy soberbia, yo que he cometido errores creo que ya pagué por ellos, yo que he blasfemado y he mentido me he arrepentido; yo, me entrego a esa virtud llamada esperanza.
Le pediré a Santa Rosa que interceda por mi, traeré de vuelta mi espirítu franciscano y todas las estampas de la Virgen, iré por las iglesias prendiéndole velas a los santos, iré a las procesiones y no volveré a usar el nombre de Sarita Colonia o de la Beata de Humay en una broma, no me burlaré de la foto de Santa Maravillas en su estampa ni de las estatuas de santos con expresiones raras. Todo por pedirle una sola cosa.
A Dios, ese que está arriba y en todas partes, al Padre y jefe de la Trinidad, a ese que envió a su único hijo, a ese que no le responde el celular a uno que yo conozco, al de la Creación en 6 días que tú dices que se nota, a "Barbas God", a ese por el que tantos hombres matan y mueren. A Dios y si es necesario a través de su hijo y de mi ángel de la Guarda, le rogaré que me quite el anacronismo del corazón, aunque sea por esta vez le imploraré que no desafine, que no pierda el compás, que no se calle y que sigas tocando.